Una de las grandes dudas a la hora de crear contenido con objetivos SEO se centra en dos aspectos íntimamente relacionados:
- La cantidad de veces que se menciona una palabra clave en un mismo documento.
- La extensión ideal de dicho documento.
Esta duda tan habitual se manifiesta generalmente en preguntas como:
- ¿Cuál es el número de palabras clave recomendadas en un artículo?
- ¿Cuántas veces debo repetir la palabra clave en un artículo?
- ¿Cuántas palabras debe tener un artículo?
1 – El concepto de la Densidad de Palabra Clave
Imagina que vas a hacer un pastel de fresas. Si pones muy pocas fresas, el pastel no sabrá mucho a fresa y tus comensales (que esperan un sabroso pastel de fresas) puede que no lo disfruten. Por contra, si pones demasiadas fresas, el pastel puede quedar fuera de juego, sin textura, y tampoco lo disfrutarán.
En SEO, la densidad de palabra clave es similar.
Si usas muy pocas veces la palabra clave que quieres posicionar, los motores de búsqueda como Google pueden no entender bien de qué trata tu contenido y no lo mostrarán a las personas que buscan esa palabra clave. Pero si usas la palabra clave demasiadas veces, tu contenido puede parecer forzado y poco natural, lo que también puede afectar negativamente a tu posicionamiento.
La clave está en encontrar el equilibrio perfecto, como poner la cantidad justa de fresas en tu pastel para que sea delicioso y atractivo para todos. ¡Así es como funciona la densidad de palabra clave en SEO!
En el contexto del SEO (optimización para motores de búsqueda), la densidad de palabra clave se refiere a la cantidad de veces que una palabra clave específica aparece en un texto en relación con el total de palabras del texto.
Por ejemplo, si tienes un artículo sobre veterinaria y cuidado de mascotas y la palabra mascotas aparece 10 veces en un texto de 100 palabras, la densidad de la palabra clave «mascotas» sería del 10%.
Es importante encontrar un equilibrio
Ahora bien, la gran pregunta es: ¿Dónde está ese punto de equilibrio?
Exceso de densidad
Si la densidad de palabra clave es demasiado alta, el texto puede parecer poco natural y repetitivo, lo que no es bueno ni para los lectores ni para los motores de búsqueda.
Este exceso puede provocar problemas SEO de diverso grado de gravedad y posibilidad/facilidad de reparación, como por ejemplo:
- Penalizaciones algorítmicas o manuales de Google Search por keyword stuffing, que es como llamamos en inglés al abuso de palabras clave.
- Pérdida de posiciones por consideración de thin content (contenido superficial, sospechoso de ser producido solamente para posicionar).
- Caída de CTR por ofrecer snippets poco útiles o que no generen confianza/curiosidad, es decir que tu resultado puede no recibir visitas incluso consiguiendo posiciones muy visibles, no te ganas ese clic porque tu título y descripción alejan al visitante.
- En general, pierdes tráfico y con ello posibilidades de negocio.
Carencia de densidad
Si la densidad de palabra clave es demasiado baja, el motor de búsqueda puede no entender bien de qué trata el texto. La página o documento no es relevante para la palabra clave deseada.
Esta falta de profundidad provoca típicamente un solo tipo de problema SEO: que los motores de búsqueda ignoren totalmente tu contenido y con ello, jamás llegues ni cerca de competir.
- Falta de relevancia. El contenido no permite extraer información útil o determinada.
- Aún con cierta calidad, el contenido puede ser percibido como texto de relleno. Esto resulta más reciente y en parte se atribuye al uso masivo y sin criterios de calidad de contenido generado por IA.
Si has oído alguna vez el término thin content, puede ser por casos así. - No llegar al público objetivo, o no resultar eficaz aún llegando a los ojos adecuados.
Resumido en términos sencillos: la densidad de palabra clave es como la cantidad de fresas en el pastel. Debe ser suficiente para que se note, pero no tanto como para que sea lo único que se note.
No existe una cifra que sirva para todo y para todos. Además, no resulta natural escribir artículos de una extensión casi milimétricamente idéntica, hoy en día podría levantar sospechas de ser contenido masivo generado por IA.
Acude a la práctica. Cualquier plataforma de publicación equipada con soporte SEO dinámico podrá ayudarte a hacerte una idea de qué funciona y qué no. Para el caso, WordPress puede ser una buena elección, por la facilidad y coste irrisorio de montarte un mínimo de espacio para pruebas, o un blog de entrenamiento.
Si esa es tu elección, deberás tomar una más: ¿qué plugin SEO vas a usar? Da igual, casi todos te van a dar una pauta sobre densidad de palabra clave. Pero ten en cuenta que son tontos como un zapato y sólo siguen una programación previa, no caigas en el error de confiar ciegamente en ellos.
Por norma general, los principales plugins SEO recomiendan una densidad de palabra clave mínima del 0,7% hasta una máxima de 2,49%.
… pero sabIENDO que instalar un plugin SEO no es hacer SEO.
Si no dispones de instrumentos de apoyo, puedes ayudarte de medios auxiliares como redactar tu contenido en un programa que haga recuento de palabras, por ejemplo Microsoft Word, o si prefieres concentrarte usando un editor de texto plano como UltraEdit (€€€) o Notepad++(free).
Si ya sabes más o menos a qué densidad de palabra clave apuntas, las mates son sencillas y te permitirán saber por dónde vas y aproximarte a tu densidad objetivo:
[ Nº de repeticiones de la palabra clave / Nº de palabras (extensión del post) ]*100 = Densidad de palabra clave objetivo, expresada en %.Para este post, aproximadamente sería: 15 repeticiones / 1812 palabras = 0,827% ≈ 0,83%

Igual que el hipotético maestro pastelero del ejemplo, un experto SEO te ayudará a convertir suficiente en excelente: es lo que hace destacar un documento, ya sea una página, un artículo, un blogpost, producto o lo que sea. Uno de mis trabajos es hacer que tus contenidos sean relevantes para los temas que tocan.
Para posicionar tus contenidos, necesitas dominar el arte de la densidad de palabra clave, entre otras muchas habilidades. O bien acudir a la búsqueda para encontrar servicios SEO para mi empresa.
Insertar repeticiones aquí y allá para incrementar la densidad de palabra clave es relativamente fácil.
Vamos a centrarnos ahora en la otra cara de la moneda:
2 – La extensión ideal de un documento
De la misma forma que no hay un documento tipo para toda necesidad, no existe una extensión universal que sirva para todos los casos. Sin embargo, resulta útil seguir unos patrones básicos que aseguren unas condiciones mínimas para poder comenzar a pensar en competir.
Estas son algunas formas documentales habituales entre los contenidos web, y algunas recomendaciones de extensión aplicables a cada uno:
Artículos de Autoridad
Artículos profesionales o de naturaleza técnica. Serían los grandes campeones para un tema concreto, posiblemente MUY concreto.
Lo que los hace campeones en su tema no es la extensión, sino la coherencia que muestre el autor a la hora de explicar el tema. Para explicar bien un tema, el autor necesitará:
- Estructurar su explicación, usando secciones y posiblemente varios niveles de subsecciones.
- En determinados campos técnicos y científicos, se exige una formalidad documental sine-qua-non.
Ya se puede intuir que este tipo de contenidos de Autoridad resultará complejo y por necesidad, extenso.
Es muy razonable recomendar un mínimo de 2000-3000 palabras de extensión.
El máximo queda en manos del caso (que puede tener límites formales), la plataforma de publicación y el público objetivo.
Una táctica para ofrecer una información relacionada muy extensa, podría ser dividir el documento en partes más pequeñas, para ofrecerlas en una secuencia lógica y estructurada que permita consultarlos uno tras otro o incluso saltar a voluntad entre ellos.
En escenarios similares, el papel de la paginación «anterior»/»siguiente» y las tablas de contenido puede facilitar mucho la usabilidad y aprovechamiento de la información.
Artículos de Posicionamiento por contenidos
Engloba todo tipo de artículo, blogpost o entrada que tiene por objetivo posicionar por la palabra clave concreta, que resultará protagonista gracias a una densidad de palabra clave suficiente y adecuada.
Su naturaleza es mucho más flexible que los contenidos de Autoridad, pero no por eso quedan exentos de poder demostrar la Autoridad del autor o la empresa emisora del contenido.
Aún siendo contenido de una hipotética empresa de ingeniería, tecnología, salud, servicios legales u otras disciplinas complejas, los redactores pueden «relajarse» un poco.
Si su público objetivo es el consumidor final o un público intermedio, que no tiene porqué entender los detalles técnicos, para este tipo de artículos primarios (como los llamo en mi metodología de SEO sostenible Growth By Method) recomendaría una extensión de no menos de 1800 palabras, con un máximo no muy lejano. Este máximo, por supuesto, es a criterio de cada cual y su circunstancia.
Siguiendo esta escala, tendríamos artículos secundarios, terciarios y así hasta lo que dé de sí esta estructura piramidal. En el entorno SEO profesional también se conoce esta estructura como silos.
Para artículos secundarios: mínimo 900-1200 palabras.
Para terciarios: mínimo 500-750 palabras, por lógica los límites de extensión máxima deberían evitar solaparse mucho con el hermano inmediatamente mayor. Esto no lo señalo como un factor SEO, sinó como un factor que nos ayude a mantener el foco en el contenido concreto que estamos haciendo.
Los plugins SEO para WordPress suelen indicar un mínimo de 300-400 palabras en cualquier caso.
En mi opinión, tendría que ser un documento muy bien hecho y muy relevante para llegar lejos con tan poco contenido. Siempre recordando que son una ayuda, no un sustituto.
